
Quisiera saber qué tiene la boca de una mujer para inspirar tan fuertemente el darle un beso. Porque se trata de la sensación más fuerte, más irresistible, más codiciable, más pasional, para cualquier hombre. Mi único temor radica en que es tan fantástica esa experiencia del roce de labios, que el descubrir la magia que esconde ese beso puede restarle fantasía al mismo. Por eso, prefiero seguir arrastrado por esa indescriptible y esotérica sensación, y mientras eso suceda, seguiré escribiendo sobre el besar a una mujer, cosas como las que revelo en las líneas a continuación.